Presentación: Objetivos de nuestro proyecto

El principal objetivo del proyecto es conocer diversos aspectos de las primeras sociedades agrícolas y ganaderas que ocuparon el NE peninsular entre el VI y el IV milenio cal BC. Para ello, nuestro objeto de estudio son las prácticas funerarias que llevaron a cabo tales sociedades.

Tal es la importancia del registro funerario que el profesor P. Bosch Gimpera bautizó a este momento a inicios del s.XX como “La Cultura de los Sepulcros de Fosa”, apelativo que se sigue usado incluso en nuestros días.

Imagen: “Foto ofrecida por ARRAGO S. L. - Jordi Roig y Joan-M. Coll” (yac. Hort de Can Torras).

Los planteamientos del proyecto se estructuran alrededor de tres grandes líneas de trabajo que nos parecen fundamentales para conseguir los fines que perseguimos, pero que sin embargo, y en buena medida, han sido obviadas en la investigación arqueológica:

1. Contextualización cronológica de los enterramientos que definen a este periodo. Este es un trabajo prioritario y el hilo conductor del conjunto de actividades que van a llevarse a cabo en el proyecto.
2. Desde una perspectiva antropológica queremos aproximarnos al conocimiento de la población inhumada a través del número de hombres, mujeres y niñas/os que fueron enterrados, de los hábitos alimenticios que los sustentaban (y si divergían en base a criterios de sexo y edad), de las actividades que realizaban y que se reflejan en los marcadores músculo-esqueléticos, de los lazos parentales que los unían valorando su mapa genético, sus patrones dentales y sus desplazamientos a partir también del análisis de los isótopos estables.
3. Desde una perspectiva arqueológica abordaremos: 
1. Estudio del instrumental depositado como ajuar: procedencia, tecnología y uso del utillaje lítico, óseo y malacológico. Valoración de los resultados teniendo en cuenta el sexo y edad de los individuos y la cronología de las sepulturas.
2. Análisis espacial (SIG) de las sepulturas con el fin de establecer patrones de distribución en base a distintos criterios: sexo/edad de las inhumaciones, estructura funeraria, cronología, calidad/cantidad de los ajuares, estado de salud de los inhumados, etc. 

Para llevar acabo esta tarea, han sido seleccionados un conjunto de contextos funerarios. Dicha selección se ha realizado siguiendo una serie de criterios como: número de enterramientos, información sobre los mismos, conservación, posible cronología, localización en distintos puntos del territorio, tipo de construcciones, etc.

En definitiva: pretendemos llegar a formular explicaciones de carácter económico, social e incluso ideológico del mundo de los vivos a través del estudio de sus propias prácticas funerarias.